Escritora y Periodista
Adivina cuánto te quiero, una oda a la inmensidad del amor
Cuando tenemos un hijo o una hija, empezamos a ver el mundo de una manera diferente. Los sentimientos ganan nuevos matices y damos lugar a una ternura que quizás antes no habíamos experimentado. Adivina cuánto te quiero es un precioso libro con el que mamá, papá y los peques pueden alimentar su lazo de amor. Esta obra que merece un lugar en la biblioteca de los niños y niñas, llega a nosotros gracias al legendario autor irlandés de cuentos infantiles Sam McBratney. La historia se acompaña de las dulces ilustraciones de Anita Jeram, para aportarnos una moraleja: el amor entre padres e hijos es tan grande, que no lo podemos medir.
¿Cuál es la historia de Adivina cuánto te quiero?
Cuando hablamos del sentimiento que nos une a nuestros hijos e hijas, todas las historias de amor son bien recibidas. Pero en Adivina cuánto te quiero tenemos una fábula verdaderamente entrañable. Se trata de un libro en formato pequeño, de tapa dura e ideal para leer a los niños y niñas desde muy chicos.
Es protagonizado por dos lindas liebres, una muy pequeña, que hace el papel de hijo o hija, y otra más grande, que representa al papá o la mamá. La liebre pequeña quiere expresar a quien la acompaña todo su amor, así que le pide que adivine cuánto le quiere. La liebre grande responde que no puede saberlo, y entonces la pequeña abre sus brazos al máximo, para dar una idea del tamaño de su amor.
Pero la liebre grande también responde, y abre sus brazos mucho más grandes, para representar cuánto le quiere a su peque. La liebrecilla quiere entonces expresar un amor más grande aún, extendiendo sus brazos hacia arriba. Y así están ambas por un buen rato, tratando de comunicar con su propio cuerpo, toda la dimensión del amor que sienten el uno por el otro.
Ya había caído la noche, y refugiándose en los brazos de la liebre grande, la pequeña declaró quererla de la tierra hasta la luna, y fue correspondida de igual manera, con un amor que va desde la tierra hasta la luna, ¡Y de vuelta!
Una historia simple, tierna y cercana
En Adivina cuánto te quiero nos encontramos con un libro en el que la ternura predomina. Es una historia de amor, del amor más puro, grande e ilimitado: el que une a los padres con sus hijos.
De una forma dulce, ambas liebres intentan comunicarse siempre cuánto se quieren, pero se dan cuenta de que ninguna de las medidas que se les ocurren, por más grandes que les parezcan, es suficiente para representar su amor.
El libro nos aporta entonces una encantadora moraleja: el amor que nos une a nuestros seres queridos, es tan pero tan inmenso, que no lo podemos medir. Las ilustraciones acompañan muy bien la narración, con figuras lindas y sutiles, dibujadas en colores pasteles.
Lo que más nos ha gustado
Además de la ternura que la historia expresa en cada palabra y la sutileza de las ilustraciones y colores, hay otro aspecto que nos ha gustado mucho de esta obra. Se trata de la selección de los protagonistas, dos adorables liebres silvestres que ayudan a los pequeños a empatizar con el mundo animal, y que además no son definidas con ningún género en específico. No existe “mamá” o “papá” liebre. Simplemente el vínculo de amor entre los personajes.
Conclusiones
En conclusión, Adivina cuánto te quiero es una de esas historias que acompañan el crecimiento de los niños y niñas. Sencilla, de lindas ilustraciones, breve y con un relato en el que el amor protagoniza, es el cuento perfecto para compartir con nuestros peques antes de dormir.