Maestra de Educación Infantil y Psicopedagoga
Atrapamiradas
Marina Núñez y Avi Ofer nos acercan este álbum ilustrado para pequeños y mayores.
Fue finalista del XII Premio Santiago Compostela 2019 y nos lleva a una historia para reflexionar.
¿Qué sucede en la sociedad que cada vez estamos más conectados con las tecnologías y menos conectados con las personas?
¿Y si dejamos de mirar tanto las pantallas y nos centramos en los momentos que nos estamos perdiendo?
¿Dónde dejamos el contacto, las miradas, la escucha, la presencia, el tiempo, la disponibilidad, la cercanía, las conversaciones de tú a tú?…
Este álbum ilustrado es una toma de conciencia de la realidad actual, de la que no nos damos cuenta. Nos acerca a los sentimientos que tienen nuestros hijos cuando perciben esa desconexión de sus padres y es un gran tirón de orejas para todas las familias que posponemos el disfrutar de momentos maravillosos e irrepetibles al lado de nuestros mayores tesoros.
Recuperar las miradas
Activar el modo ON con nuestros seres queridos, principalmente con nuestros peques que nos necesitan cerca, presentes y disponibles. Pequeños cambios en nuestras vidas pueden suponer grandes cosas en el futuro. Recordemos que la infancia se cuece a fuego lento y la educación se basa en pequeños peldaños que suman hasta llegar a la cima. Nos hace darnos cuenta de los valores que queremos fomentar en la familia.
¿Qué nos cuenta la protagonista?
Vera, cansada de la situación que ve cada día, se decide a encontrar una solución y animada sale en su busca. Pero se da cuenta de que lo que ella necesita parece imposible encontrarlo, sólo obtiene respuesta de otros niños como ella y que le animan a seguir.
Pero… ¿qué le preocupa a Vera?: no conseguir las miradas que tanto necesita y anhela. Ha comprobado que ni en casa ni en la calle existen y que cada vez se siente menos vista.
Ella intenta captar la atención de sus padres de diferentes maneras: gritando, enfadándose, llevando a cabo conductas inadecuadas, complaciéndoles en determinados momentos...pero aun así no logra lo que necesita e incluso obtiene miradas que no son las que busca. Todo ello le lleva a sentir una profunda tristeza.
Los abuelos en la sociedad actual
¿Qué solución encuentra Vera?, pedir ayuda a su abuela, ella siempre tiene miradas, presencia, escucha, paciencia, tiempo, empatía y comprensión. Entre las dos preparan un plan para lograr lo que tanto necesita: ¡LAS MIRADAS!
Y no es más que un juego que conlleva olvidarse de las pantallas y empezar a mirarse, a verse, observarse, sonreírse, saberse cómplices…y con ello logran lo que están buscando.
La presencia y atención hacia los niños
Vera, al volver a casa, le cuenta a su familia lo que ha sucedido y es entonces cuando se funden en un gran abrazo de amor y complicidad dejando a un lado todo aquello que obstaculiza esas miradas y esa necesaria conexión.
¡Qué importante compartir risas, complicidad, charlas, juegos, caricias, cercanía…! Sentirse pertenecientes, saberse importantes y poder contribuir es fundamental para la autoestima de nuestras hijas.
Lo que nos ha gustado
Es un libro manejable para niños y niñas, de lectura fácil, con vocabulario y lenguaje sencillo, adaptado y comprensible. Utiliza frases cortas que hacen que el mensaje llegue de manera clara.
Con unas ilustraciones dinámicas y muy expresivas, con escenas cotidianas y colores suaves nos hace ver claramente las prisas de los adultos y el interés que prestamos a las tecnologías. Quedan también reflejados los estados de ánimo de su protagonista: animada, preocupada, triste…y todo ello logra que los niños puedan conectar con la historia.
Conclusión
Es una toma de conciencia para las familias, para replantearnos de verdad qué es lo importante y conseguir que disfrutemos de esos momentos maravillosos y únicos que nos brindan nuestras hijas. Además, nos acerca a los sentimientos que tienen nuestros peques cuando no obtienen la atención que necesitan.
Es un cuento fundamental para tenerlo en casa y poder reflexionar sobre nuestra realidad personal para poder tomar acción.
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