Maestra y Pedagógica Terapéutica
Pasión por la música
Enclavada en las maravillosas fiestas de San Lorenzo de Huesca, transcurre la musicalizada historia de Abril, una niña de siete años, que junto a su gata Cleo, participa en un pequeño recital de música donde les sucederá algún que otro acontecimiento extraordinario.
El amor y la amistad siempre pueden con la oscuridad
Abril se encontraba ensayando su actuación de violín en el kiosco del parque Miguel Servel, junto a su gata Cleo y las dos bailaban al ritmo de la melodía de San Lorenzo, cuando de pronto salió de entre las ramas de un árbol un loro gruñón que se comió todas las notas que salían del precioso violín de Abril, el cuál tras unos segundos dejó de sonar.
El parque se tornó oscuro y entonces Cleo preguntó al loro qué quién era y porqué lo había hecho, a lo que el loro respondió; soy Guido, voy a instalarme en el parque y no me gustan ni la música ni los ruidos. Pero tras una propuesta que no pudo rechazar, Guido se puso a cantar de contento y tuvieron un final maravilloso.
Los mensajeros
En lo que se refiere a la autora e ilustradora de este entrañable cuento, Ana Belén Villadas Yus, os diré que es escritora de poesías y cuentos infantiles y que escribe con mucho amor y sensibilidad para los más pequeños de la casa. Además de “Abril y Cleo“ ha publicado más maravillosos títulos infantiles como “Brisa y los Gnomos”, “El bosque musical” o “El aula de la amistad”, que no podéis dejar de leer porque poseen unos preciosos valores en su interior.
La música y el baile son primordiales en la vida, ya que proporcionan pasión y alegría, pero sobre todo son importantes para los niños y niñas, porque desarrollan su sensibilidad y fomentan valores como el respeto, la creatividad y el esfuerzo y la responsabilidad si es que además tocan algún instrumento. Además, la música une y crea lazos de amistad, como bien narra Ana Belén en su historia y todo ello unido al ambiente de unas fiestas tan entrañables como las de San Lorenzo donde los oscenses salen a las calles a disfrutar de la música y de sus gentes para celebrar la alegría de vivir y de estar juntos, forman un halo mágico donde suceden cosas maravillosas como les ocurren a las protagonistas de este bonito cuento.
En cuanto a la edad recomendada de 3 a 8 años, como siempre digo, se podría ampliar tanto por arriba como por abajo, teniendo en cuenta que los niños más pequeños pueden seguir perfectamente la historia a través de las preciosas ilustraciones que transmiten claramente el mensaje y adaptando el contenido a la edad, además seguro que a los mayores de 8 años también les gusta escuchar y leer historias entrañables, abogo con ello a la creatividad del lector para transmitir la historia adaptándola a sus oyentes, utilizando la imaginación y adecuando el vocabulario si fuese necesario.
El secreto está en los pequeños detalles
He de decir que lo que más nos ha gustado de este cuento tan emotivo es el cariño y la ternura con los que la autora narra la historia de Abril y lo importante que es la música para la pequeña, además de la sensibilidad que demuestra la niña hacia los animales, empezando por la bonita relación con su gata Cleo, que va con ella a todas partes y terminando con el loro Guido que, a priori, era gruñón y poco afable.
Conclusiones
Los valores y la sensibilidad de la historia de Abril y Cleo hacen de este cuento un imprescindible para los más pequeños de la casa e incluso, un regalo muy especial. Es un libro ideal para contar y recontar, ya que como sabemos, a los niños y niñas les encanta volver a escuchar una y otra vez los cuentos que transmiten mensajes y moralejas, algo que esta bonita narración cumple a la perfección.
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