Estudiante de Educación Primaria y Pedagogía
Echar una mano desde dentro, qué hacer ante el diagnóstico de autismo
¿Cuántas veces habremos oído decir a alguien “déjalo, es que es autista” o “no habla, es un poco raro, como autista”? ¿Cuántas veces lo habrán dicho sin saber ni siquiera que significa el TEA?
El 2 de abril celebrábamos el día mundial de la concienciación sobre el Trastorno del Espectro Autista. Desde los años 40, desde el primer diagnóstico, han ido cambiando tanto la denominación como las características, según se investigaba.
En este artículo veremos:
- Trastorno del Espectro Autista o TEA
- Qué podemos hacer en casa:
- El ejemplo
- Ayudar a entender los comportamientos y las intenciones
- Reaccionar en cuanto se ven los primeros síntomas de estrés emocional
- Enseñar técnicas de resolución de problemas
- Utilizar el método Smart
El trastorno del Espectro Autista o TEA
Se define como una condición neurológica que afecta a la manera en la que la persona se comunica y cómo experimenta el mundo. No está determinada aún la causa de su aparición, pero sí que se ha visto una fuerte implicación genética.
Sigamos conociendo algo más… Como dijo Stephen Shore, doctor en educación: “Si ha conocido a una persona con autismo, ha conocido a una persona con autismo”. Se considera Espectro porque hay diferentes niveles de complejidad, no es una escala sobre habilidades. Cada persona tiene una o varias áreas cerebrales influenciadas y otras que pueden ser consideradas “neurotípicas”.
No podemos clasificar a una persona según su diagnóstico, pero sí que podemos clasificar sus necesidades.
Entonces… ¿cómo se si mi hijo tiene autismo o no? ¿Qué señales de alerta tenemos que tener más en cuenta? Principalmente, son tres las dimensiones nucleares que pueden darnos alguna llamada de atención: intereses peculiares y repetitivos; alteraciones en comunicación y lenguaje; e, interacción social alterada.
Qué podemos hacer en casa
Y una vez que tengo el diagnóstico… ¿qué hago en casa? Se puede ayudar de muchas formas a nuestros peques, pero hoy me quiero centrar en la ayuda para el aprendizaje emocional. Este es esencial para la interacción y que mejor que el núcleo familiar con el que pasas más tiempo para aprender y mejorar.
El ejemplo
El buen ejemplo es importante para que tanto todos los niños como todas las niñas puedan tener una base sobre las relaciones interpersonales. La relación entre los padres, entre los hijos, entre los demás familiares y amigos. De esta manera pueden conocer las reglas básicas de interacción y comunicación para poder reproducirlas con sus familiares, compañeros de clase, sus profesores y el resto de las personas. Tenemos que ayudarles a ver la importancia de los momentos de encuentro y cómo actuar en ellos.
Ayudar a entender los comportamientos y las intenciones
Muchas veces tenemos que “leer entre líneas” lo que los demás cuentan o nos dicen, especialmente en España que nos gustan las frases hechas y los refranes. ¿Quién no corre, vuela? Para una persona la cual entiende las oraciones según el sentido literal de las mismas, esto puede ser muy difícil de comprender y puede dificultar la interacción. Incluso anuncios de productos pueden “ir con segundas”. Es imposible para una persona echar a volar o que los que se van a Sevilla pierdan su silla. Por ello tenemos que ayudarles y enseñarles lo que son los matices subjetivos para que puedan participar por completo y disfrutar de la interacción de los demás.
“Si ha conocido a una persona con autismo, ha conocido a una persona con autismo” Stephen Shore
Reaccionar en cuanto se ven los primeros síntomas de estrés emocional
Situaciones que lleven al no entendimiento puede llevar a momentos de estrés emocional que provoquen rechazo al contacto con otras personas o, incluso, de rechazo propio. Es importante saber identificar estos momentos para llenar a la persona de compasión y entendimiento de modo que se sientan bien consigo mismos.
Enseñar técnicas de resolución de problemas
Los problemas pueden variar desde situaciones que solo tienen que ver consigo mismo sino también con los demás. Los niños diagnosticados con TEA necesitan tener las cosas muy claras, necesitan que las opciones que se les ofrecen estén definidas. Al igual que las instrucciones, deben ser claras y fáciles de leer, que no tengan alguna intención oculta que haya que interpretar. Por ello, técnicas basadas en definir el problema, ver puntos positivos y negativos, definir y evaluar opciones, replantear el problema y las soluciones… todas son técnicas que pueden ayudar a este proceso.
Utilizar el método Smart
Esta técnica es muy utilizada en los colegios para establecer objetivos específicos, medibles, alcanzables, importantes y basados en un tiempo específico. Pasa lo mismo cuando lo más pequeños están comenzando a desarrollarse y a madurar y nosotros podemos ayudarles. Ya hemos vivido lo suficiente como para conocer nuestras limitaciones y nuestros puntos fuertes y que hacer con ellos. Podemos ayudarles a hacer lo mismo. Analizar que son capaces de hacer y potenciarlo.
Un diagnóstico de TEA puede ser impactante al principio, ya sea porque nos asusta lo desconocido o porque nos impacta, pero muchos profesionales y tips como los anteriores pueden ayudarnos a llevarlo de la mejor manera. No podemos clasificar a una persona según su diagnóstico, pero sí que podemos clasificar sus necesidades.
Referencias:
autism, A. a. (2020). Right from the Start. London: Registered company 3375255.